La insulina basal es una forma de insulina de acción prolongada que se administra una vez al día para mantener los niveles de glucosa en sangre estables durante largos períodos.

La insulina postprandial, por otro lado, es de acción rápida y se usa para controlar los niveles de glucosa después de las comidas.

Uso Clínico:

• Insulina Basal: Se utiliza para mantener un nivel basal de glucosa en sangre en personas con diabetes tipo 1 y tipo 2. Ayuda a evitar picos de glucosa en ayunas y entre comidas.
• Insulina Postprandial: Se administra antes o después de las comidas para controlar el aumento de glucosa después de ingerir alimentos. Es esencial en el manejo de la diabetes tipo 1 y puede ser útil en la tipo 2 cuando otros tratamientos no son suficientes.

Ambos tipos de insulina son fundamentales en el control de la diabetes, ayudando a evitar complicaciones y mantener niveles de glucosa dentro de rangos saludables.

• Relacionar datos clínicos del paciente en la Solicitud de Exámenes de Referencia.
• Drogas que pueden disminuir los niveles de insulina: calcitonina, cimetidina, bloqueadores beta-adrenérgicos, etanol, fenobarbital, fenitoína, diuréticos tiazida.
• Factores que pueden elevar los resultados de insulina son el tratamiento con estrógenos y progesterona, drogas como albuterol, epinefrina, levodopa, prednisolona, hormonas tiroideas.

• Ayuno de 10 -12 horas