Las reacciones alérgicas o de hipersensibilidad están clasificadas en cuatro categorías (Tipo I a IV). La mayoría de las reacciones alérgicas están clasificadas como alergias atópicas Tipo I con anticuerpos IgE como inmunoglobulina responsable. Después de la exposición inicial a un alérgeno, el sistema inmunológico produce anticuerpos IgE específicos para ese alérgeno. Estos anticuerpos IgE se encuentran en circulación unidos a la superficie de células efectoras (basófilos, eosinófilos y mastocitos). En exposiciones posteriores, el alérgeno se une a la IgE unida a la célula produciendo la degranulación de estas y la liberación de mediadores (histaminas, serotonina, leucotrieno, factores quimiotácticos), que son los responsables de los síntomas de alergia. El diagnóstico clínico de la alergia se confirma mediante la demostración de la presencia de anticuerpos IgE específica para alérgenos en el suero del paciente.
Condiciones del Estudio
. Relacionar datos clínicos del paciente en la Solicitud de Exámenes de Referencia.